MarÃa De Jesús Romo, 78, de Las Vegas, NV, falleció el 22 de febrero después de sucumbir ante la cardiopatÃa.
MarÃa nació en 1942 de José y Josefa en Zacatecas, México.
En 1958, conoció a Rigoberto y un año después formalizaron su unión ante Dios. Sus lazos de amor dieron fruto a una familia de cuatro hijas Nau, Rosa, Martha y MarÃa, y cuatro hijos Francisco, Mario, Rigoberto e Enrique.
El deseo de sacar a su familia adelante y buscar nuevas oportunidades motivó a la joven familia a desarrollar una nueva vida en los Estados Unidos.
Lejos de sus propios familiares y en tierra ajena, MarÃa se dedicó a lo que era primordial para ella, la familia. Dio su todo para criar, educar e inculcar valores a sus ocho hijos. Sus esfuerzos sólo se pueden describir como un éxito total, con hijos, nietos y bisnietos que la llenaron de orgullo.
El amor de MarÃa se podÃa sentir y ver en todas sus obras, pero su labor de pasión, y por lo que fue más conocida, fue la comida. Lejos de sus raÃces, nunca dejó olvidar los sabores y platos de su paÃs natal. Para su familia era la comida diaria, pero con el tiempo se dieron cuenta que MarÃa estaba dotada de un don culinario apreciado por todos.
La ausencia de MarÃa deja a sus familiares y
seres queridos con un pena profunda e inconsolable.
Sus hijos Nau y Francisco fallecieron antes que MarÃa. Deja en duelo a su marido Rigoberto, e hijos Mario, Rosa, MarÃa, Martha, Rigoberto e Enrique.
La familia queda muy agradecida por verse este homenaje y ruegan una oración por el eterno descanso de su alma.
English:
MarÃa de Jesús Romo, 78, from Las Vegas, NV passed on 22 February after succumbing to heart disease.
MarÃa was born in 1942 to José and Josefa in Zacatecas, Mexico.
In 1958 she met Rigoberto and a year later they took their vows before God. Born from the fruit of their love was a family of four daughters Nau, Rosa, Martha, and MarÃa, and four sons Francisco, Mario, Rigoberto, and Enrique.
The desire to see their children succeed and seek out new opportunities motivated the young family to start a new life in the United States.
Far from her own relatives and in a foreign place, MarÃa dedicated herself to what was essential to her, her family. She gave her all to raise, teach good manners, and instill values in her eight children. Her efforts can only be described as a complete success, with children, grandchildren and great-grandchildren that brought her great pride.
Maria's love could be felt and seen in everything she did, but her passion, and what she was best known for, was food. Far from her roots, she never let forget the flavors and dishes of her native country. For her family it was the daily meal, but over time they realized that she was endowed with a culinary gift appreciated by all.
MarÃa's absence leaves her family and loved ones with deep and inconsolable grief.
MarÃa is predeceased by Nau and Francisco. She is survived by her husband Rigoberto, and her children Mario, Rosa, MarÃa, Martha, Rigoberto, and Enrique.
The family is very grateful to you for reading this tribute and request your prayers for the eternal rest of her soul.